Por casualidades de la vida, estos últimos días he salido hasta en la sopa. En ese sentido, tranquilos, creo que os dejaré descansar el resto de julio y agosto. Os envío los enlaces a dos entrevistas que concedí (cómo suena eso, madre mía, qué rimbombancia) hablando sobre los Cruentos ejemplares y otras microficciones, por si os interesan:
En breve, otro relato. ¿Micro, breve, más largo? Quién sabe...
Pues a oir y leer vamos, Don David.
ResponderEliminarEn cuanto nos deje el próximo relato, volvemos.
Un abrazo,
Usté es un fan y lo demás son tonterías, Don Pedro.
ResponderEliminarUn abrazo,
D.
Me encantó que aclares que nos sos un criminal por escribir cuentos sobre crímenes. Yo deberia aclarar que no soy niña porque escribo cuentos sobre niños. Pero no, mejor que piensen que soy una adolescente tardía jaja. Algo muy divertido del audio son los golpecitos onomatopéyicos del relator de tu cuento, en la parte de los golpes del sifón en la cabeza. Me reí mucho, tambien con el "Ja ja ja". No podia parar. Tuve que pensar en algo triste para recomponerme! (Aunque eso es tambien porque estoy un poco chiflada, ja ja pero eso va por cuenta mia). Me encantaría escuchar todo tu libro (que pronto me llegará!) en un CD de audio-libro. Me di cuenta al oir tu texto en vez de leerlo, que es muy teatral, sos un buen dramaturgo tambien! Nunca pensaste en hacer obras de teatro? (Pequeñas escenas). Bueno, tratando de sintetizar (algo imposible para una argentina), fue muy interesante y entretenida tu entrevista! (Ya la habia escuchado antes)
ResponderEliminarEscucharla dos veces es, evidentemente, síntoma de chifladura. Me preocupas, Carla, me preocupas, aunque me alegra que te gustara. Yo, con los golpes, me llevé una sorpresa. Tampoco los esperaba, jejeje. El teatro, de momento, lo dejaremos para quienes saben...
EliminarGracias por dejarme tu opinión, amiga.
¡Vale pues voy a leer y escuchar!
ResponderEliminarHazlo en días diferentes, lo contrario sería contraproducente...
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